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Tajo, a su paso por Toledo, muestra desde ayer una asquerosa espuma blanca que cubre la superficie del río, cambiando el paisaje de la castellana ciudad.
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Río Tajo a su paso por Toledo. Fuente (ABC) |
La Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) y el Seprona han iniciado una investigación conjunta para llegar a la raíz de lo que con toda seguridad parece ser un vertido industrial ilegal. A pesar de que por desgracia, la presencia de dichas espumas es habitual en el río durante el periodo invernal, debido a las bajas temperaturas y la elevada concentración de fosfatos que lleva el río, no se justifica con la temperaturas actuales, por lo que todo apunta a la mano del hombre. Mientras la investigación sigue su curso y las administraciones se pasan la "patata caliente" de una a otra, el ecosistema del río se está viendo gravemente afectado, perjudicando fauna y flora a medida que sigue su curso.
El problema es que actualmente resulta más rentable pagar las multas que ajustarse a la legislación medioambiental vigente, por lo que las grandes industrias optan por contaminar.En boca del presidente de la CHT, Miguel Antolín:
"La normativa debería de endurecerse para que actos de "piratería" como este posible vertido al Tajo no se salde con una simple multa"
Esperemos que no sea necesario un desastre medioambiental para que se cambie la legislación actual al este respecto.
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